martes, 27 de diciembre de 2016

Una historia de guerra: Capítulo 22.

A la mañana siguiente, apenas salido el sol, Hayato se levanta y mira la cara de la joven durmiendo a su lado, tan tranquila y feliz. El joven, viendo que aún es muy temprano, se decide a ir al bosque pero en el camino ve que la puerta de la habitación de Atsuko se encuentra entreabierta. Echa una mirada y se encuentra con los ojos celestes de la joven que él pensó que aún dormía.
Atsuko: Hato-kun, ¿ocurre algo?
Hayato: N-no es nada. ¿Qué haces despierta tan temprano?
Atsuko: Nozomi-chan me despertó hace un rato y no me pude volver a dormir viendo su linda carita.
Hayato: Pareces enamorada de Nozomi-chan.
Atsuko: ¿Estás celoso? *Dice con una mirada provocativa.*
Hayato: Es mi hija, no puedo estar celoso de ella. *Dice con un aire orgulloso.*
Atsuko: ¿Qué te despertó tan temprano?
Hayato: Nada, me levanté solo. ¿Desayunaste?
Atsuko: No aún pero me comenzó a dar un poco de hambre.
Hayato: ¿Quieres ir a buscar unas bayas? Yo tampoco comí nada todavía.
Atsuko: Bien. *Toma a la pequeña y la rodea con una tela con la que, luego, ella misma se envuelve para poder llevar a la beba y poder tener los brazos libres.*

Salen de la base y caminan hacia lo profundo del bosque en busca de bayas.

Atsuko: Es un lindo día para dar un paseo, ¿no crees?
Hayato: Sí, está despejado y el clima es templado, no hace ni frío ni calor.
Atsuko: ¿Por qué vinimos al bosque? ¿Acaso no había comida en la base?
Hayato: Hay poca, no nos acercaron suministros debido a que debemos salir hoy hacia la capital. Reservaremos lo que podamos para el viaje.
Atsuko: Ya veo… ¿Crees que tengamos tiempo para visitar una de esas “ciudades del placer”? Quisiera ver a alguna geisha bailar…
Hayato: Cuando acabe esta guerra tal vez puedas ir.
Atsuko: Que pena. ¿Qué piensas hacer con tu vida luego de esto?
Hayato: Con “esto”, ¿a qué te refieres?
Atsuko: Luego de la guerra. Si volvemos a pelear esta guerra no durará mucho.
Hayato: ¿Por qué lo dices?
Atsuko: Hay algunos grupos que quieren parar con este derramamiento de sangre sin sentido.
Hayato: ¿Sin sentido?
Atsuko: ¿Acaso sabes por qué empezó esta guerra?¿Por qué peleas?
Hayato: No me importa el por qué empezó.
Atsuko: Entonces, ¿por qué arriesgas tu vida aquí?
Hayato: *Toma a Atsuko de los hombros y ella centra su mirada en aquellos ojos esmeralda que tanto le fascinan.* Me uní al ejército para protegerte.
Atsuko: *Se sonroja un poco por lo inesperado de su respuesta.* Hato-kun…
Hayato: Pero, ahora…
Atsuko: ¿Estás indeciso?
Hayato: Ambas me gustan, quiero protegerlas, amarlas, no quiero herir a ninguna… ¿Por qué tuve que enamorarme de las dos?
Atsuko: No te enfades contigo. Solo necesitas pensar tranquilo. Una vez acabado todo esto seremos libres y podremos vivir como queramos.
Hayato: ¿A qué te refieres con eso?
Atsuko: Podemos vivir los 4 juntos si así lo deseas, al menos, por un tiempo.
Hayato: ¿Hablas en serio?¿No te molesta?
Atsuko: Vamos, yo fui la que volvió sin avisar. Tú ya habías empezado una vida nueva, sin mí...Yo-
Hayato: Atsu-chan, cálmate. ¿Crees que hiciste algo malo?
Atsuko: Si no hubiera vuelto, si tan solo hubiese muerto allí… Tú podrías vivir feliz con Mimi-san y, y… *Dice mientras le caen lágrimas por el rostro.*
Hayato: Y no tendría a Nozomi-chan, mi hija, ni siquiera hubiese sabido que tuve una niña contigo.
Atsuko: Y hubieses podido tener un hijo con Mimi-san. Hubieses vivido feliz junto a ella, pero aquí estoy, arruinandolo todo.
Hayato: ¡No estás arruinando nada! ¡¿Por qué niegas las cosas buenas que te pasan?! ¡Entiendo que desees la felicidad para los demás pero también sé feliz!
Atsuko: Hato-kun… *La pequeña empieza a llorar.* ¡Ah! Nozomi-chan. *Toma a la beba en brazos.* Tranquila, todo está bien, mamá es una tonta, no te preocupes.
Hayato: Espero que eso no se herede.
Atsuko: ¡Oye! *Ambos se miran y empiezan a reír.*
Hayato: ¿Puedo cargarla?
Atsuko: ¡Sí! *Coloca a la niña en los brazos de su padre con extremo cuidado.* Así está bien.
Hayato: Ni que fuera a soltarla.
Atsuko: Se te puede caer, se mueve mucho cuando está molesta.
Hayato: Parece tranquila.
Atsuko: Ahora. ¿Tienes hambre? *Ambos estómagos rugen.*
Hayato: Aún no comimos nada…
Atsuko: Creo que vi unos frutos por allá, vuelvo enseguida. *Camina entre algunos árboles y poco a poco su figura se desvanece de la vista del joven padre.*
Hayato: Así que ella se sentía de esa manera… *Mira a Nozomi.* Tu madre es una verdadera tonta. Pero ella es MI tonta. No se la voy a dar a nadie más. Papá se va a quedar con ustedes y te va a criar junto a mamá para que crezcas como una niña fuerte, inteligente e independiente, aunque podrías depender un poco de tu papi de vez en cuando.

Unas orejas se mueven entre las sombras de los árboles y una chica empieza a llorar sin que aquella persona la oyera.

Atsuko: Toma. *Extiende su mano que se encuentra llena de frutos de distintas plantas.*
Hayato: Ninguna es venenosa, ¿verdad?
Atsuko: ¿Tan poco confías en mí?
Hayato: Confío plenamente en tí.
Atsuko: Entonces come sin miedo.
Hayato: Gracias por la comida. *Ambos se sientan en el pasto y empiezan a comer los frutos.* Estaban buenos.
Atsuko: ¿Me ensucié?
Hayato: ¿Comes con las mejillas o con la boca? Tienes toda la cara manchada. *Se ríe.*
Atsuko: ¡No te rías! *Se levanta y se acerca a un riachuelo. Mira su reflejo en el agua.* Que desastre. *Se limpia con el agua que por allí pasaba.* ¿No tendríamos que regresar? Deberíamos partir en  un rato hacia el castillo.
Hayato: Tienes razón, ya me había olvidado. *Nozomi empieza a moverse en los brazos de su padre.* Emm… Atsu-chan, creo que quiere ir contigo.
Atsuko: ¿Qué pasa pequeña? *Dice al mismo tiempo que toma en brazos a la bebita. La niña toma un dedo de su madre y lo mete en su boca.* Me parece que alguien tiene hambre. *Suelta una risita. Abre su kimono, se sienta y empieza a amamantar a su hija.* ¿Nos quedamos 5 minutos más?
Hayato: Supongo que 5 minutos no le harán daño a nadie.

Pasado un buen rato, las tropas están listas para partir a la capital. Los soldados, sin embargo, comienzan a comentar sobre la llegada del líder junto a Atsuko. Comentarios como: “Qué habrán estado haciendo los dos solos en el bosque” se oyen y Mimi intenta callarlos.
Mimi: ¡Vamos, cállense!
Atsuko: Así no lo vas a lograr nunca.
Mimi: Entonces, ¿cómo debería hacerlo? *Dice con un tono de burla en sus palabras.*
Atsuko: *Ata su cabello con una cinta y pone sus manos alrededor de su boca.* ¡CÁLLENSE GUSANOS! *Todas las miradas se centran en ella y con un aire orgulloso habla.* Por si no se dieron cuenta, estamos por partir así que esperen las órdenes CALLADOS. Quienes estén en desacuerdo pueden enfrentarse a mí en un combate mano a mano. ¿Nadie tiene nada que decir? Bien.
Hayato: G-gracias Atsuko. Hace rato que no veía ese lado suyo. Bien. Todos, recuerden, siempre sigan al líder de su grupo, si hay algún herido deben comunicárselo al curandero que se encuentra al final de cada grupo, lo mismo si alguno enferma. Serán 4 días largos y las provisiones son limitadas. No las utilicen si no las necesitan. Eso es todo. ¡Vamos!

Tras ese grito todos empiezan a caminar, aquellos que pueden,vuelan pero ninguno baja la guardia hasta ya caída la noche. Todos están cansados y sus pasos son lentos.

Mimi: Deberíamos descansar, ya fue suficiente por hoy, necesitan dormir un poco.
Atsuko: Es muy riesgoso, estamos en una zona peligrosa, no por nuestros enemigos, hay muchos vándalos y grupos criminales por aquí.
Hayato: ¿Sería prudente arriesgarnos a eso por un descanso?
Atsuko: Pasando el lago es más seguro, estamos no muy lejos.
Mimi: Hay un templo abandonado en medio del lago, ¿y si descansamos allí?
Hayato: ¿Cómo sabes que está abandonado?
Mimi: Una amiga vivía en ese lugar pero fue forzada a irse por la guerra.
Hayato: ¿Hay lugar suficiente para todos?
Mimi: Si es solo para descansar no habrá problema.
Hayato: Bien, entonces solo tendremos que caminar por unos 40 minutos más.
Mimi: Atsuko-san, ¿se siente bien?
Atsuko: Sí, solo necesito un poco de agua y estaré bien.
Hayato: ¿Lo dices en serio? Estás un poco roja.
Atsuko: Estoy bien, no se preocupen.

Tras unos extenuantes 40 minutos, por fin llegan al tan anhelado templo. Era un lugar viejo, descuidado. Estaba lleno de telarañas y polvo, pareciera que en cualquier momento el techo caería y todo el lugar se derrumbaría sobre sus cabezas. A pesar del cansancio, todos colaboraron para limpiar, más las mujeres que los hombres, y, finalmente, todos estiraron los futones y se echaron a dormir. Hayato estaba atrapado entre las dos mujeres que querían dormir con él mientras se peleaban con su mirada entre ellas y jalaban un brazo cada una para su lado.

Hayato: Chicas, chicas, vamos a dormir. ¿No están cansadas?
Mimi: Atsuko-san, ¿no necesitaba descansar?
Atsuko: Dije que necesitaba agua y ya bebí suficiente así que no  tienes por qué preocuparte por mi estado Mimi-san.
Hayato: ¿Y si dormimos todos juntos? Así no tienen que pelear.
Atsuko: ¡Pero hoy es MI turno!
Mimi: Atsuko-san, ¿acaso no puede compartir?
Hayato: Atsu-chan, por favor, luego dormiremos juntos 5 días seguidos, ¿bien?
Atsuko: ¡Trato!
Mimi: ¿Eh? Pe-pero, ¡no es justo!
Atsuko: Vamos a dormir Mimi-san.

Así, todos durmieron, algunos mejor que otros, después de todo una madre no puede ignorar el llanto de su pequeña cría.

Al fin!!! He vuelto!!! Ya no hay más exámenes ni clases,ni nada que me impida escribir excepto por mi falta de inspiración pero haré lo posible por traer más capítulos y tal vez finalizar esta historia este año nuevo que se acerca.Como siempre dejaré mis redes sociales aquí abajo. Saludos a todos mis lectores!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario